6 Pasos para un inicio exitoso de clases en niños con autismo

26 Feb 6 Pasos para un inicio exitoso de clases en niños con autismo

El inicio de clases puede ser un desafío para cualquier niño debido a los cambios en la rutina y la adaptación a nuevos entornos, y esto puede ser un poco más retador para niños con autismo. Sin embargo, con una preparación adecuada basada en estrategias del Análisis de Conducta Aplicado (ABA), es posible facilitar esta transición.

A continuación, se presentan seis pasos clave para ayudar a tu hijo a adaptarse exitosamente al entorno escolar.

1. Reunirse con el equipo docente y psicopedagógico

Antes del comienzo de clases, puede ser beneficioso coordinar una reunión con las maestras, terapeutas y personal de apoyo de la escuela. Compartir información sobre las necesidades específicas del niño, sus fortalezas e intereses, así como las estrategias que han demostrado ser efectivas, puede marcar una diferencia significativa en su adaptación. Además, es recomendable discutir posibles apoyos, como adaptaciones en la rutina y el uso de sistemas de comunicación aumentativa o alternativa.

2. Visitar la escuela antes del inicio de clases

Realizar una o más visitas previas con tu hijo al colegio antes del primer día de clases puede reducir la ansiedad. Al ser un ambiente más tranquilo, sin la presencia de otros estudiantes, tu hijo puede familiarizarse mejor con el nuevo entorno. Durante estas visitas, permite que tu hijo explore las áreas clave, como el aula, los baños y el patio de recreo. Tomar fotos o videos de estos espacios puede ser útil para reforzar la familiaridad en casa.

3. Crear una historia social con imágenes del colegio

Las historias sociales son herramientas visuales que ayudan a los niños a comprender y prepararse para situaciones nuevas. Elaborar una historia que incluya imágenes del salón de clases, las maestras y otros espacios relevantes puede proporcionar al niño una visión clara de lo que puede esperar. Esta estrategia puede reducir la incertidumbre y aumentar la confianza del niño al enfrentar el nuevo entorno.

4. Implementar una rutina similar a la del colegio

Establecer una rutina en casa que refleje el horario escolar puede facilitar la transición. Esto incluye horarios consistentes para despertarse, vestirse, comer y realizar actividades estructuradas similares a las escolares. La consistencia y la previsibilidad en las rutinas diarias son fundamentales para los niños con autismo, ya que les brindan una sensación de seguridad y control.

5. Fomentar la autonomía en actividades diarias

Desarrollar habilidades de independencia en tareas cotidianas aumenta la confianza del niño y reduce la necesidad de asistencia constante en la escuela. Practicar actividades como abrir y cerrar la lonchera, manejar recipientes de comida, usar el baño de manera autónoma y vestirse adecuadamente son esenciales. Estas habilidades no solo promueven la independencia, sino que también mejoran la autoestima del niño.

6. Adaptación progresiva según las necesidades del niño

Dependiendo de cómo responda el niño, considerar una incorporación gradual al entorno escolar puede ser beneficioso. Comenzar con jornadas más cortas y aumentarlas progresivamente permite que el niño se adapte a las nuevas demandas sin sentirse abrumado. Es crucial monitorear su progreso y ajustar el plan según sea necesario, siempre en colaboración con el equipo educativo.

Estrategias adicionales para facilitar la transición

• Uso del refuerzo positivo: es fundamental reconocer y reforzar los logros del niño mediante palabras de aliento que resalten sus avances, por pequeños que sean. Esto puede incluir elogios verbales, recompensas tangibles o actividades que el niño disfrute como motivación por comportamientos deseados. Por ejemplo: “¡Lograste ponerte el uniforme tú solo!”, “¡Qué bien te divertiste en la visita al colegio hoy! ¡Qué genial!”
• Fortalecer habilidades sociales y comunicación funcional: Practicar interacciones básicas, como saludar, pedir ayuda o participar en juegos con compañeros, puede mejorar la integración del niño en el entorno escolar. Además, es importante asegurarse de que el personal docente esté familiarizado y capacitado en los sistemas de comunicación que utiliza el niño, ya sean verbales, gestuales o mediante dispositivos de comunicación aumentativa.

Conclusión

Una preparación cuidadosa y el uso de estrategias basadas en ABA pueden transformar el inicio de clases en una experiencia positiva para los niños con autismo. Al proporcionar apoyo estructurado, fomentar la independencia y colaborar estrechamente con el equipo educativo, se sientan las bases para una adaptación exitosa y un desarrollo académico y social óptimo.